En asamblea convocada por la APSF, el personal de LT9 se declaró en estado de alerta y asamblea permanente para exigir la reincorporación de los trabajadores despedidos por la nueva gerencia de la emisora, y ante otros hechos que configuran una política de ajuste, incumplimiento del Convenio Colectivo y condicionamientos a la libertad de expresión.
A inicios de 2024, el empresario de medios Orlando Vignatti informó públicamente que compró las partes iguales de la radio que poseían ATE Mutual y la familia Saiz. Desde el momento en que el grupo rosarino tomó el control del medio, con la presidencia en el directorio de Marisa Aída Gallina, se han sucedido despidos, abuso del ius variandi y limitaciones a la tarea periodística informativa que van más allá de una decisión editorial.
La situación se agrava con el anuncio por parte de la empresa, en reiteradas ocasiones y de manera informal a algunos empleados, de llevar adelante un Procedimiento de Crisis apenas meses después de estar al frente de la radio.
Por todo esto, exigimos la reincorporación de la y los compañeros despedidos, rechazamos las políticas de ajuste implementadas por la empresa así como sus pretensiones de iniciar un Procedimiento de Crisis.
En tanto no vamos a tolerar los incumplimientos al Convenio Colectivo de Trabajo advirtiendo que todo esto ya fue denunciado al Ministerio de Trabajo de la provincia.
Los trabajadores y trabajadoras de LT9, a lo largo de su historia, han demostrado su vocación de lucha así como también su compromiso para hacer crecer la radio, han defendido en unidad sus fuentes de trabajo resistiendo cualquier medida que vaya contra las condiciones laborales, la libertad de expresión y el trabajo periodístico.